Días de cine. Hoy, Bulky Rape I.

Internet es una gran ventana que nos acerca el mundo con unos simples clics de ratón. Y nos descubre rarezas como la que hoy os traigo, cine japonés que algunos tacharán como porno, pero yo lo veo más como cine de autor, con un rollo Dogma 95 con ese toque oriental y exótico. La historia de dos japonesitos que claramente es un drama, con trazas de envidias, celos y venganza.

Bulky Rape I

Japonesitocachondo1

En la primera parte, Japonesitocachondo1 está tranquilamente disfrutando de su cuerpo cuando un grupo de desalmados entra en la habitación donde está con otra persona, todo parece ser un secuestro. Pero los desalmados no solo tienen la intención de retener a su victima, también quieren violarla.

Diosjapo1, Japonesitocachondo2 y Diosjapo2

Pero vamos a dejar las cosas claras, Japonesitocachondo2 está bueno, pero sus violadores lo están mucho más, así que no es como para hacerse el digno, que opone mucha resistencia pero cuando Diosjapo1 empieza a follárselo, se queda más tranquilo.

¡¡No por favor!! (no se lo cree ni él)

Bueno, ya que estamos... Pero por no haceros un feo, que conste

Japonesitocachondo1, muerto de envidia, empieza a hacer ruido para que los violadores se den cuenta de su presencia y le den lo suyo y lo de su prima. Y aquí es donde empieza lo bueno: Diosjapo2 lo pone mirando a Cuenca (o a Osaka) desde diferentes posturas, lo que hace que el amor sea palpable en esta parejita. Después de una tierna historia de amor, es Diosjapo1 quien le enseña la geografía japonesa.

Después de media hora haciendo ruido se dan cuenta...

¿Cómo decías que era tu nombre?

Me gustaría presentarte a mis padres.

¿Así que cuenca está por allí?

Ojo al rollo Canal+ de las pelis japos.

Y ahora te daré lo de tu prima.

Opinión personal: Japonesitocachondo2 es medio tonto y por eso no se ha comido casi nada. Yo estoy con 3 tíos como esos en la misma cama y me corro de gusto varias veces, sin que me toquen, ya no digo cómo me pondría si me hacen lo que a él.

Todos los tontos tienen suerte.

Y sí, como se puede adivinar por el título, existe una segunda parte mucho más dramática que ésta.

¡Un saludo!