Cómo promocionar bien una fiesta bear y no morir en el intento

En ésto de promocionar las quedadas, ahora que llega el veranito y salen fiestas a mogollón, es interesante ver cómo el único medio que se les ocurre a los organizadores para anunciarlas es mediante banners en las páginas de osos de medio mundo, carteles más o menos currados (consistentes en algo sencillo y funcional como la banderita osuna que aparece en la guadalkibear del 2010 o la cada año más orientada al músculo y la calvicie de madbear), video promos cocinando tortilla típica española, o enseñando cómo la peña se lo pasa bomba en la sauna o en las fiestorras con la confianza de que hagan lo que hagan, la bear community irá en masa a sus parties a follar con desconocidos, que los de siempre ya están muy repasados.

Por eso me gusta cuando hay gente que va un poquito más allá y se crea un spot como mandan los cánones, de esos que te incitan a ir si tienes pelas o a hacerte una gallarda con el anuncio. Márketing total que le llaman. Y dentro de este apartado estan los de subwoofer, que no se cortan un pelo, nunca mejor dicho, y cuelgan en la red semejante obra de arte:



Morbo, tíazo impresionante, carne a tutiplén y encima haciéndolo con clase y sin parecer vulgar. Mola.

Aquí en España como no he visto que ninguna fiesta haga algo parecido (invito a todos los que sepáis algo al respecto nos enviéis material), nos tenemos que conformar con los anuncios que hacen las compañías para anunciar sus productos. Claro está, solo me interesan las que incluyen ositos, como éste bastante famoso de aerored que incita a comprar pastillas para evitar que le saltes un ojo a alguien con el botón de la camisa mientras cenas.
Gorditos embutidos en una especie de trajes de neopreno rosas. Como siempre que se usa un gordo para un anuncio, éste no sale bien parado. Como es nuestro caso. Aquí los pobres hacen de burbujas de gas pero como les pagan por tirarse a una piscina y sonreir mientras incuban un resfriado pues les da igual.



Y no les duele en prenda hacer semejante papelón, no, que luego a lo tonto, les salen bolos como hacer de reporteros por la calle para disfrute de todos nosotros que podemos apreciar de cerca el paquetorro que marcan, el poco culo que gastan y la escasa gracia que emana de su ser. ¿Y qué más dará, si un gordito embutido en rosa siempre es un placer?



Que no digo que los carteles y las promos no funcionen en el rollo oso ibérico, ahí está el éxito que cosechan cada vez, pero ya si hacen cositas como las de subwoofer prometo comprar los packs más caros que ofrezca cada fiesta. Aunque sigan regalando la cutre camiseta que les da Heineken por comprar sus cervezas en cantidades industriales.