10 may 2018

Beardeportes alternativos. Hoy: pelotamano.


A mí de siempre me ha gustado el balonmano. En el colegio nos hacían practicarlo todas las semanas y yo era de los mejores lanzando triples porque me había comprado un libro de Epi donde te explicaban la técnica para lanzarlos y practicaba mucho en casa.
Con el tiempo me contaron que eso era baloncesto y me llevé una pequeña decepción, pero me aficioné al handball, que en inglés suena mejor y tiene connotaciones sexuales así como de poner las pelotas en las manos de la gente, y hoy en día sigo todos los campeonatos nacionales e internacionales.
En el handball en los descansos te tumbas a descansar y en vez de masajes te hacen mamadas.
Hoy os voy a mostrar a uno de mis jugadores preferidos porque marca muchos goles y la camiseta le sienta muy bien. Se llama Rankinio Milzinas o algo así, tampoco es muy importante cómo se llame, la verdad, y como sé que algunos de vosotros sois profanos en la materia, os voy a explicar un poco cómo va este deporte, con algunas imagenes de mi pequeño ídolo y así os quedáis con la copla.
Si tienes la pelota y ves a una mole así acercándose como si fuera el cobrador del frac, apártate.
La táctica es importante. La fijación del de las gafas por el paquete de mi chico, también.

Aquí Ranki con el número diez a la espalda como los grandes.

En el hadball puedes dar palmaditas en el culo a quien te guste y no queda gay.
Hay que llevar la ropa muy ajustada para que los contrarios se calienten y se desconcentren.
Hay que llevar una buena alimentación, si no, a la hora de lanzar triples no llegas al aro.
El balonmano es un juego de machos. Romper camisetas es muy sexy y es muy rollo lucha de barro.
La preparación física es básica. Aquí Ranki limpiando la corrida para no resbalarse al hacer steps.
Fundamental: usad byly macho u os descalifican por apestosos.
Y ahora os pongo un video explicativo, que viendo en movimiento las carnes de la gente se entienden mejor las cosas. Os recuerdo conceptos básicos: el portero puede tocar el balón con las manos pero a nadie le importa, porque en los penalties puedes apuntar a los huevos, lo desgracias y a ver para qué quiere las manos ya. Puedes avanzar con el balón durante tres pasos y no te pitan dobles ni doble falta ni nada, un cachondeo vaya. Y por último, te puedes meter en la portería literalmente para marcar un gol. Luego se te enreda el pelo con la red y hay que usar un cuchillo jamonero para despegarte, o cortarte la cabeza, pero ese es otro tema.

En fin, que a mí el balonmano me la trae floja, que solo me gusta el Rankinio y por verle peleando y cayéndose por el suelo como una morcilla en la fiesta de un pueblo ya doy dinero.

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